QUE TÚ SEAS EL PASTOR

¡Cómo necesita el mundo

le guíes por el camino,

que tú seas el pastor

que le lleve a su destino!

La guerra, el odio, el terror,

la masacre, el exterminio,

la imposición por la fuerza

de ideas, normas y ritos,

están destruyendo al mundo

por soberbia y fanatismo,

pues ha olvidado el mensaje

de amor y de sacrificio.

Mundo de ambición y lujo,

mundo de humano egoísmo.

¿Quién habló de caridad?.

Y se abandona a los viejos,

y se mata al no nacido,

el concepto de familia

es obsoleto, es antiguo.

Se margina al desgraciado,

no se quiere oír sus gritos.

El hombre ha olvidado que es

caminante, peregrino

que le llegará la hora

de dar cuentas al Altísimo.

¡Mundo de ciegos y sordos!

¡Ojos sin luz de infinito!

Se acalla la voz del alma.

Se enmudecen los sentidos.

¡Cómo necesita el mundo

tu pastoreo divino!

ASÍ ES SEGUIR TU EJEMPLO

Si algún día me ofenden,

si destruyen mi hacienda,

si me dañan o hieren,

no tornaré la ofensa,

perdonaré la falta

y seguiré tu senda

con la fe y con tu gracia

tendré paz en la tierra.

Mas si agravian a Dios,

si destruyen su hacienda,

si en el altar de Amor

mancillan las ofrendas,

castigaré sus faltas

lucharé con mis fuerzas,

por mi celo y tu gracia

habrá paz en la tierra.

Así es seguir tu ejemplo

en tu Pasión y muerte,

así es seguir tu ejemplo

contra los mercaderes.

Emma-Margarita R. A.-Valdés

email del autor: universo@universoliterario.net